The End of the F***ing World
10/10
Otra vez Channel 4 lo hizo. Esta producción del canal ingles que luego fue adquirida por Netflix lleva a recordar la excelente y clásica serie Skins. La trama no se parecerá mucho pero claramente se expresan los conflictos adolescentes.
La historia, original del cómic con el mismo nombre a cargo de Charles S. Forsman, es protagonizada por Alyssa (Jessica Barden), una adolescente de 17 años que es rebelde, impulsiva y maleducada, por el simple hecho de que no encaja en donde esta. Se une junto a James (Alex Lawther) quien se considera a si mismo como un sociopata, amante de matar animales va en buscar de una presa mayor,, Alysaa. La unión casual de estos dos logra una relación de dependencia, inicio de amor y sentimientos encontrados, a la vez que van surgiendo los mayores miedos que esconden para aparentar rudeza y fortaleza.
En mi opinión es una maravilla. Como dije antes Channel 4 la volvió a hacer, Skins fue un antes y un después en la series para adolescentes, en el mundo de pensamientos no tan alegres que todos piensan que poseen, tocando temas como adicciones, relaciones sexuales, abusos, violencia y trastornos alimenticios, rompe el molde de lo que se ve. Exactamente me paso con esta serie, no llega ese extremo de exponer todo eso pero denota los problemas sentimentales y familiares que sufren muchos jóvenes y que son escondidos.
La conexión entre los dos protagonistas es fantástica, no deja nada que reprochar, y menos que menos de las actuaciones de Jessica Barden y Alex Lawther, espectaculares, como representan dos adolescentes marginados, sociopata y rebelde que dan un giro a su vida cuando se dan cuenta lo que pueden sentir de verdad por otra persona.
También es importante los temas que toca en cuanto a la familia, como se sobrepasa la situación a esa edad, no poder explicar lo que sucede porque no hay alguien que entienda.
Otro punto para destacar es la musicalización que logra un avance en la historia acompañando a las escenas de una manera muy buena.
Considero que vale la pena mirarla, los capítulos son 8 y de 22 minutos cada uno, para entretenerse y poner atención a los problemas de hoy en día, ya que a lo que apunta en realidad es a una clara burla de la sociedad actual y de la importancia de otros temas como el dinero, la tecnología, la lujuria frente a las relaciones y la familia.
